La recomendaciones que puedes tomar para combatir el dolor de rodilla o de plano evitarlo son las siguientes: Tomar un puñado de hojas de salvia y colocar en un paño empapado de agua tibia. Apretar (como si fuera a estrujarla) y colocar sobre la rodilla. Realizar fricciones con este paño durante 10 minutos. Repetir a diario hasta que el dolor haya cedido. Este remedio es ideal cuando no existe inflamación y cuando ha pasado 24 horas de haber recibido un golpe en el área de la rodilla.
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